El verdadero origen de la violencia y el terror
El verdadero origen de la violencia y el terror
Les presento un texto de Pedagogía del oprimido, el libro más emblematico de Paulo Freire, que le dedico a la Ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich.
Patricia, se que sos doctora en Ciencias Políticas, pero tu instinto perverso y sádico es más fuerte que la sabiduría que puede darte tu formación, lo que te hunde en la insensibilidad social e ignorancia más supina. Por eso, te regalo este breve texto para que, si te dignás a leerlo, quizás se cuele en tu espíritu un rayo de luz que te ayude a revisar tu grosera y deshumnizada conducta.
Digas lo que digas en tus discursos manipuladores, la verdad es simple y concreta: “No hay mayor violencia que la opresion; que es lo que tu gobierno mejor practica”. Acá va el texto prometido:
“Toda situación en que, en las relaciones objetivas entre A y B, A explote a B, A obstaculice a B en su búsqueda de afirmación como persona, como sujeto, es opresora. Tal situación, al implicar la obstrucción de esta búsqueda es, en si misma, violenta. Es una violencia al margen de que muchas veces aparece azucarada por la falsa generosidad a que nos referíamos con anterioridad, ya que hiere la vocación ontológica e histórica de los hombres: la de ser más.
Una vez establecida la relación opresora, está instaurada la violencia. De ahí que ésta, en la historia, jamás haya sido iniciada por los oprimidos. ¿Cómo podrían los oprimidos iniciar la violencia, si ellos son el resultado de una violencia? ¿Cómo podrían ser los promotores de algo que al instaurarse objetivamente los constituye?
No existirían oprimidos si no existiera una relación de violencia que los conforme como violentados, en una situación objetiva de opresión.
Son los que oprimen, quienes instauran la violencia; aquellos que explotan, los que no reconocen en los otros y no los oprimidos, los explotados, los que no son reconocidos como otro por quienes los oprimen.
Quienes instauran el terror no son los débiles, no son aquellos que a él se encuentran sometidos sino los violentos, quienes, con su poder, crean la situación concreta en la que se generan los “abandonados de la vida”, los desharrapados del mundo.
Quien instaura la tiranía no son los tiranizados, sino los tiranos.
Quien instaura el odio no son los odiados sino los que odian primero.
Quien instaura la negación de los hombres no son aquellos que fueron despojados de su humanidad sino aquellos que se la negaron, negando también la suya.
Quien instaura la fuerza no son los que enflaquecieron bajo la robustez de los fuertes sino los fuertes que los debilitaron”.
Queda claro Patricia, la violencia y el terror son instaurados por la oligarquía, es decir, por ustedes, y no por el pueblo, como te gusta vociferar todo el tiempo!!